Abrir, servir, disfrutar aromas y sabores de un surtido de quesos, junto a un vino,
son las claves de una amena velada
Alrededor de una bandeja de quesos creamos ocasión de conversación y de reunión.
La degustación toma su tiempo, al partir los quesos, presentarlos y compartirlos se
generan situaciones especiales, con conversaciones, comentarios y momentos que
entretienen y que invitan a imaginar e introducir en la plática ideas interesantes y
que sin duda nos harán pasar momentos que vamos a querer repetir.